Maridaje

¿Has metido una cerveza al congelador? Esto es lo que pasa…

2 de junio de 2022

¡Hola, Tragones! ¿Alguna vez han metido una cerveza al congelador? ¿Saben lo que pasa cuando lo hacen? Pues aquí les explicamos…

Claro que el congelador es el método más común para enfriar la cerveza, sobretodo en esta temporada de calor, pues es decepcionante llegar a casa y anhelar una cerveza bien fría y que esta no esté a la temperatura deseada y puede que por eso optemos por meterla al congelador, sin embargo no es tan buena idea como parece.

Según señala el portal tuscafeteras, no es buena idea llevar las cervezas al congelador, ya que, sin quererlo, podríamos estar afectando los alimentos que tengas guardados.

Un ejemplo es que si tienen pollo a una temperatura de -25°, y de pronto introducen unas latas a temperatura ambiente, habrá un desajuste que podría dañar la comida. Además, eso hará que el tiempo de enfriado sea mayor, así que ni siquiera lograrás el cometido. 

Otro motivo por el que el congelador no es la mejor idea y que probablemente es el más conocido o nos ha pasado cuando olvidamos por error las cervezas en el congelador es que la cerveza podría estallar y hacer un desastre.

Y la otra razón que les damos para evitar esta práctica es que se podría afectar su sabor. Además si la dejamos por más tiempo del necesario y se congela  el gas carbónico que contiene la cerveza en altas cantidades pierde su fuerza y varía su aroma y sabor.

Y si se preguntan ¿si no se puede llevar la cerveza al congelador, qué tal el tarro? Pues tampoco es la mejor de las ideas, las grandes marcas de cerveza señalan que el cristal congelado puede presentar olores que matan el sabor de la bebida. 

Aquí te damos tips para enfriar rápidamente una cerveza:

La mejor opción es simplemente dejarla en el refrigerador hasta que esté a la temperatura correcta. En ese sentido vale la pena revisar la etiqueta para saber qué punto es el mejor para disfrutarla. 

Lo recomendable es que una cerveza se beba cuando esté entre los 0° y los 6° de temperatura. Aunque hay algunas variedades que, incluso, es mejor no enfriar, pero eso depende de la marca y estilo. 

En condiciones normales una cerveza tarda entre 1 y 3 horas en enfriarse en el refrigerador así que tomen sus precauciones y sean pacientes. Y si tienen prisa elijan latas, pues el envase de aluminio se enfría más rápido que uno de vidrio, debido a que el metal tiene mayor conductividad, y por ende, bajará la temperatura del líquido rápidamente. 

Y en caso de que no quieran esperar 3 horas se recomienda colocar las botellas de cerveza en un recipiente, de preferencia metálico, con hielo, agua y sal. Lo que sucederá es que la sal buscará absorber el calor del agua, pero como esta está fría, atraerá el calor de la lata o botella de cerveza.

Sólo se procuren utilizar sal de grano y que las cervezas queden totalmente sumergidas. Si quieren que este proceso sea aún más rápido hay que girar el contenido del recipiente con un cucharón.

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