Hidromiel: antiguo elixir
9 de diciembre de 2024
La hidromiel, una de las bebidas alcohólicas más antiguas conocidas por la humanidad, ha sobrevivido a través de los siglos como un elixir místico que une dos de los ingredientes más naturales y sencillos: agua y miel.
Esta bebida fermentada, también llamada «vino de miel», se obtiene mediante la fermentación de la miel diluida en agua, a la que se le pueden añadir levaduras y, en ocasiones, frutas, especias o hierbas para enriquecer su sabor.
El proceso de elaboración de la hidromiel es bastante similar al de la cerveza, pero en lugar de malta, se utiliza miel, lo que le da un perfil de sabor único, con notas dulces y florales que pueden variar dependiendo del tipo de miel utilizada.
La fermentación convierte los azúcares de la miel en alcohol, produciendo una bebida que puede variar desde una versión dulce y ligera hasta una más seca y fuerte, con una graduación alcohólica que puede ir desde los 8% hasta los 20%.
A lo largo de la historia, la hidromiel ha sido considerada una bebida de dioses y guerreros. A menudo se consumía en celebraciones, rituales y banquetes, siendo una bebida que simbolizaba la conexión con lo divino y lo ancestral.
En la actualidad, la hidromiel está experimentando un resurgir entre los amantes de las bebidas artesanales y los entusiastas de la historia, quienes aprecian tanto su sabor único como su conexión con las tradiciones más antiguas de la humanidad.
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Lu García