El clericot es una bebida refrescante y afrutada, originaria de Francia pero popularizada en muchas partes del mundo, especialmente en América Latina. Es una mezcla perfecta de vino tinto y frutas frescas, ideal para disfrutar en reuniones sociales, picnics o simplemente para refrescarse en un día caluroso. Su preparación es sencilla y permite una gran variedad de combinaciones de frutas, adaptándose al gusto de cada persona. A continuación, te presentamos una receta clásica para preparar un delicioso clericot:
Ingredientes:
1 botella de vino tinto (750 ml)
1 taza de jugo de naranja
1/2 taza de brandy
1/4 taza de azúcar (ajusta al gusto)
1 manzana, cortada en cubos
1 pera, cortada en cubos
1 durazno, cortado en cubos
1 naranja, cortada en rodajas
1 limón, cortado en rodajas
1 taza de uvas, cortadas a la mitad y sin semillas
1 taza de fresas, cortadas en cuartos
1/2 litro de agua mineral o refresco de limón (opcional)
Hielo al gusto
Instrucciones:
En una jarra grande, vierte el vino tinto, el jugo de naranja y el brandy. Mezcla bien.
Añade el azúcar y revuelve hasta que se disuelva por completo.
Agrega todas las frutas cortadas (manzana, pera, durazno, naranja, limón, uvas y fresas) a la mezcla de vino.
Revuelve suavemente para combinar todos los ingredientes.
Cubre la jarra y refrigera durante al menos 2 horas, o preferiblemente toda la noche, para que los sabores se mezclen bien.
Justo antes de servir, añade el agua mineral o refresco de limón para darle un toque burbujeante, si lo deseas.
Sirve el clericot en copas con hielo, asegurándote de añadir algunas frutas en cada copa.
